martes, 13 de diciembre de 2011

¡Su hijo ya no es más un bebé!

El comienzo de la escuela les recuerda a los padres que sus hijos están creciendo.

Los niños entre 6 y 12 años de edad crecen y maduran a velocidades muy distintas. Es difícil definir lo que es "normal". Pueden existir grandes diferencias de altura, peso y contextura entre los niños sanos. Algunos factores relacionados con ello son la dieta, el ejercicio y los genes. Algunos niños comienzan la pubertad o están cerca de ella antes de ser adolescentes.

Los niños empiezan a ser más independientes de sus padres. Pueden volverse rebeldes. También admiran lo externo, como a sus amigos, quienes suelen ser del mismo sexo. La aprobación de sus pares es muy importante. Su hijo puede probar algunos comportamientos nuevos para ser parte del "grupo". Éste puede ser un momento en el que los padres o los maestros identifican trastornos del aprendizaje o problemas de conducta en los niños. Estos problemas pueden empeorar a medida que pasa el tiempo, de modo que es importante buscar ayuda lo antes posible.


Psicología infantil. De los 6 a los 12 años

lunes, 7 de noviembre de 2011

Aspecto social



La pandilla supone para el niño el poder separarse de los padres afectivamente. Tiene gran importancia en su desarrollo psicológico. La pandilla tiene unas características propias:
  • Autonomía en la elección de amigos, el niño los elige y a veces no son compatibles con los de la familia.
  • Código de leyes, reglas. Hay un reglamento con leyes explícitas (expresadas, dichas, formuladas), pero también con códigos implícitos (que se saben).
  • Lenguaje típico en la pandilla, que a veces sólo ellos entienden.
  • Un lugar secreto donde quedan.
  • Un secreto, suele estar materializado en un objeto concreto.
  • Las pandillas son monosexuales.
  • Unión fuerte entre ellos, frente a un oponente común, que suele ser la otra pandilla. Potencia lazos de amistad, pero no es una pandilla agresiva o violenta. Tiene un carácter más defensivo que agresivo.
El escolar modelo no suele caer bien en la pandilla, porque roba la cordialidad en el grupo, prefiere estudiar a salir con la pandilla. Este niño modelo no se integra y vive años de soledad.El líder de la pandilla suele representar la fuerza física, identificándose con el ser mayor, grande. Suele ser autoritario, porque en los juegos se queda siempre con el mejor papel y cuando no le gusta, lo da por terminado.

Inteligencia



Piaget Período de la lógica (operaciones concretas).

Operaciones concretas = inteligencia operatoria. Una operación (mental) se puede definir como una acción interiorizada, con dos cualidades: 

1) Reversible; 
2) Se integra en una estructura de conjunto.

Reversibilidad. Es uno de los rasgos definitorios de una operación; tiene dos manifestaciones, nosotros podemos anular una acción que hemos realizado, por inversión o por reciprocidad. La inversión o negación supone llevar a cabo una acción justamente contraria a la que hemos realizado; siempre podemos hacer en la dirección inversa. La reciprocidad o compensación; una operación recíproca, totalmente distinta de la primera porque compensa o anula los efectos de ésta. Y los agrupamientos significa que las operaciones mentales están integradas en una estructura de conjunto. Las operaciones mentales no se producen de manera aislada, siempre existe interdependencia entre unas y otras.

El paso del niño de la prelógica a la lógica es a veces brusco (1º Primaria), el niño busca coherencia en sus pensamientos y se produce un cambio de resolver los problemas de forma intuitiva (como hacía antes) a utilizar la lógica. Se da la superación del egocentrismo cognitivo. En clase es capaz de cooperar, reflexionar antes de contestar o hablar, o antes de actuar. Por tanto pasa de la centración a la descentración, de la irreversibilidad a la reversibilidad, de actuar con un pensamiento mágico lleno de fantasía a tener en cuenta la realidad. La evolución es que adquiere la conservación de la sustancia (6 años) y del peso (9 años). Adquiere el englobamiento de clase, tiene el concepto de número y trabaja con él, ordena, adquiere la tercera dimensión del espacio y entra en la etapa esquemática del dibujo, idea unificada del tiempo, la lógica es concreta (el niño sólo razona con la realidad, lo que se puede ver, tocar...), el pensamiento concreto permanece ligado a la realidad empírica.

Realismo moral



Es la tendencia a considerar los deberes y los valores, normas, etc que se relacionan entre ellos y tienen valor en sí mismos, independientes de la conciencia. Tres características:
  • Se observan al pie de la letra, no es la intención.
  • Heterónomo, exterior a la conciencia y obligatoriamente impuesto, sea cual sea la circunstancia.
  • Lleva consigo una responsabilidad objetiva.
El desarrollo de la moral es evolutivo, el niño con el tiempo va a cambiar de la heteronomía (que viene de los padres) a un respeto mutuo, de la responsabilidad objetiva a una subjetiva y de observar las normas al pie de la letra a tener en cuenta la intencionalidad.

Kolhberg

Tres niveles:

  • Nivel preconvencional, la base de la moralidad son los valores que reflejan una presión externa
         El niño actúa  para que no le castiguen.
         Individualismo, propósito instrumental (lo moral vale si sirve a sus intereses).
  • Convencional. La base de la moralidad es que las normas sociales hay que respetarlas para mantener cierto orden social.
          Obedece las normas para ser buena persona.
          Las normas evitan que se rompa el sistema social.
  • Post-convencional. La base es respetar principios y valores universales.
          Se cumple la obligación por un contrato social.
          Está orientado hacia el principio ético universal.

Desarrollo moral



Dos fenómenos dentro de la moralidad:

  • La práctica de reglas.
  • La conciencia de las reglas.

Piaget
  • Estadio motor o individual. El niño juega a las canicas según sus deseos o costumbres motrices. La regla no es obligatoria, porque es motriz (0-2 años).
  • Estadio egocéntrico (2-5 años). El niño recibe del exterior las reglas y las imita, pero no importa quién va a ganar, todos pueden ganar. La conciencia de las reglas es algo sagrado, eterno (las reglas no se pueden modificar).
  • Cooperación naciente (6-8 años). Ya importa quién gana, pues todos no pueden ganar, intentan controlar el comportamiento del otro en el juego; se ponen de acuerdo con las reglas. Éstas hay que respetarlas por lealtad al grupo.
  • Codificación de las reglas (a partir de 8 años). El juego queda regulado en todos sus detalles. Discuten por las reglas. Lealtad al grupo.

Desarrollo de la personalidad


Erikson a esta etapa la denomina habilidades del yo frente a inferioridad, el niño se tiene que sentir competente en algo, hábil. Hay que potenciar las habilidades del yo (que el niño realice actividades).
El conocimiento de sí mismo va a pasar de ser algo muy general y basado en atributos externos y arbitrarios, a ganar en contenidos psicológicos. Los niños empiezan a describirse como personas con sentimientos, pensamientos y capacidades propias, a partir de los 6-8 años. En este desarrollo del autoconcepto los padres son fundamentales. El niño se va a juzgar y a evaluarse según las reacciones, las etiquetas, los calificativos... que recibe de personas significativas, sobre todo de padres y maestros. Cooley introduce el concepto del yo a través del espejo para explicar este fenómeno; los padres tratan al niño de una forma determinada y el niño responde adaptándose a esas expectativas. Coopersmith analiza cuatro aspectos importantes para la formación de la autoestima:

Autoconcepto: concepto de uno mismo sin evaluar.
Autoestima: el aspecto evaluativo y enjuiciador que de sí mismo tienen los niños.

  • Significación, la forma en que se siente que se le acepta y le aprueban personas importantes para el niño; que se sienta importante para alguien.
  • Competencia, grado de habilidad para las distintas tareas, ya sean de deportes o escolares.
  • Logro de estándares morales y éticos. Es importante que el yo ideal (lo que el niño cree que debiera ser) no se separe del yo real, así no siente que está fallando en sus expectativas.
  • Poder. El grado en el cual sienten que pueden influir en su propia vida. Por eso en este último aspecto un exceso de sobre protección por parte de los padres contribuye en la baja autoestima. Los niños con más autoestima solían tener padres cariñosos, que aceptaban a los niños con sus sentimientos y les mostraban acepto. También mostraban interés por los pequeños problemas de los niños; facilitaban la comunicación de opiniones, sentimientos...; pero a la vez establecían normas firmes y consistentes. Y les animaban a tomar decisiones por sí mismos y tenían en cuenta las opiniones de sus hijos. Les planteaban exigencias de acuerdo con su edad.